En post anteriores hemos hablado acerca de la fascitis plantar (dolor localizado en el talón que se irradia hacia la planta del pie), esta semana continuamos con otra patología que también causa dolor en el talón como es el espolón calcáneo. El espolón calcáneo es una formación de hueso debida a los esfuerzos de tracción de la fascia plantar sobre el calcáneo que presenta dolor en la cara plantar del calcáneo.
A la exploración, la presión firme con el pulgar aplicada sobre el centro del talón produce más dolor. El dolor provocado por una presión digital firme sobre todo el borde de la fascia con el tobillo en flexión dorsal confirma la presencia de fascitis plantar asociada. El pie plano y la contractura del tendón de Aquiles pueden producir espolones calcáneos por el aumento de la tensión en la fascia plantar. Se ha descrito también una asociación entre la presencia de espolón plantar y numerosas enfermedades como la obesidad y la diabetes.
Una de las consultas más comunes en aquellas personas que realizan deporte y o actividad física en forma regular, es el dolor del talón. La fatiga y el estrés al someter a esta articulación a entrenamientos intensos en deportes donde prevalecen los saltos pueden generar este trauma doloroso en el talón.
A lo largo de la historia ha existido una gran controversia en cuanto al papel del espolón calcáneo en la aparición de la fascitis plantar y se cuestiona si es el espolón el que produce dolor en el talón. En cuanto a esto según los últimos años la evidencia científica ha descartado la teoría del espolón como causa primaria de dolor, siendo esta la fascitis plantar. Hay que aclarar, que el hecho de encontrar un espolón calcáneo en pruebas radiológicas no tiene significación clínica, ya que la mayoría se descubren accidentalmente y sin embargo, están presentes en el 50% de los dolores en el talón.
Sin embargo, el espolón calcáneo sí que puede llegar a provocar sintomatología en caso de acompañarse de atrofia de la almohadilla grasa del talón, lo que hace que sea más fácil que se produzca un pinzamiento nervioso (atrapamiento del nervio del abductor del 5º dedo), o cuando el espolón es de un tamaño importante. En estos casos sí que debe ser considerado en el contexto del síndrome doloroso del talón.
En cuanto al tratamiento decir que al igual que en la fascitis plantar los ejercicios de estiramiento de la pantorrilla y las férulas nocturnas suelen ser efectivas para eliminar o disminuir el dolor. Además, el uso de vendajes adhesivos alivia la tensión sobre la fascia plantar y reduce la tracción perióstica dolorosa. Todo esto se puede combinar con fármacos anti inflamatorios.
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